CON TODO POR DECIDIR

Todo gol cuenta y todo punto es válido cuando se juega una liga, sobre todo si ese gol te da la victoria para que sumes los tres puntos y la segunda victoria consecutiva. Llegamos a la recta final, los 8 partidos que quedan mandan, el calendario a priori favorece al Real Zaragoza, siempre que éste no se haga el harakiri.

Ayer se ganó 1-2, sin Culio y sin Ángel, dos piezas importantes, y aunque hubo jugadores que destacaron por encima de otros, el trabajo colectivo y el sacrificio del grupo fue lo que empujó a la victoria. Sin embargo, sigue sin ser suficiente, el Real Valladolid gozó de más y mejores ocasiones, pero de menor acierto y suerte. Esos momentos de incertidumbre le pueden costar puntos al Real Zaragoza, puntos que no puede destinar de manera tan fácil a la suerte, porque equipos como A.D. Alcorcón o Real Oviedo, con mejores delanteros, pueden no fallarlas.

Una vez más volvimos a regalar un gol en un rechace. Manu Herrera realizó paradas que valieron puntos y no se le puede culpar por ese gol, el despeja hacia un lado, pero como se demuestra últimamente, la defensa está lenta en las segundas ocasiones. Se vuelve a abrir el debate con Bono, pero por mucho que valore al joven guardameta, no es el momento, Manu bloca más balones que el marroquí y, visto lo visto, no nos podemos permitir más rechaces.

Un tema que ya está zanjado, es la necesidad de Rico en la banda, con él ganamos otra alternativa en la salida de balón, siempre buscando a Hinestroza ya sea con pases elevados o de otra forma. Por cierto, gran partido del colombiano también, desbordando y provocando faltas. Lo que convierte a esta banda izquierda en inamovible, sin experimentos, ni rotaciones, al menos hasta que vuelvan las flaquezas. Lo mismo puedo decir de Lanza por la derecha, desaparecido hasta que aparece, una perogrullada lo sé, pero es que los 6 balones que toca por partido este jugador se transforman en 6 ocasiones, ayer una fue gol y otra una asistencia.

Tampoco quiero olvidarme de Dorca y Ros, ayer el catalán hizo el mejor partido de la era Carreras, aguantó, luchó y sacó la pelota, un valor añadido que este equipo necesitaba y por lo que se le debe acoger de nuevo como uno más, porque se lo ha merecido. Pero si algo estoy apreciando en estos últimos partidos es el esfuerzo y sacrificio de Javi Ros, cada día asume más responsabilidad, un líder en la sombra, el único que pude sacar el balón de nuestro campo, al menos hasta que Morán regrese, baja a ayudar, la pide, la da, se mueve, la vuelve a pedir, la juega por el otro lado. Ha asumido su rol y leestá dando vida a este equipo.

A Pedro no le voy a dedicar más líneas, no está centrado y es una pena. A Isaac le faltan minutos, es el más flojo de la defensa, pero en seguida alcanzará el nivel y más con la competencia que viene ahora. 

Del último que quiero hablar es de Dongou, está claro que Dongou no es Ángel, ayer ni tiró a puerta, parecía más un falso 9 que un ariete, presionó, se movió, peleó balones, jugó muy bien en equipo, pero le faltó hambre, careció de picardía y egoísmo, podría ser falta de confianza. Pero cuando eres el único punta de un equipo con aspiraciones a ascender, tienes que echarle morro y galones, aunque no los tengas.

Próxima cita el Domingo que viene a las 7:15 en el estadio de la Romareda contra la A.D. Alcorcón.

¡Siempre Real Zaragoza!