EL DÍA DE CÁCERES

Hoy se celebra el homenaje a Fernando Cáceres, un jugador que tras tres temporadas en el Real Zaragoza dejó huella. Ya no solo por haber ganado una Copa del Rey y la Recopa, sino por formar parte de una plantilla que realmente emocionaba y ofrecía un juego que a poco que vieras, daba la sensación de saber que todos los jugadores aportaban lucha y entrega. Igual suena extraño irse por estos derroteros al hablar del homenaje a un jugador, tras un trágico incidente que casi le cuesta la vida y que supuso someterse a diversas intervenciones, pero cuando echamos la vista atrás, pocos recordarán a un único jugador, por el mero hecho de que a ellos se les podía llamar equipo. 

Costó un tiempo, pero se hizo una plantilla competitiva, bien engrasada. ¿Qué diferenció al equipo en el que Cáceres se sintió a gusto y al que quería volver en un futuro? Juntar a jugadores consolidados con promesas y nuevas adquisiciones, además de contar aunque no en exceso con la cantera. El contraste con los días de hoy es evidente, teniendo que fichar un alto porcentaje de jugadores por temporada, amén de que pocos han sido seguidos o estudiados, o al menos esa es la sensación que nos llevamos. 

El grupo que se hizo fue mítico, no parece necesario recordar aquí alineaciones, incluso gente que no llegó a verlos jugar por su corta edad, podría ir nombrándolos. Otra de las diferencias era la entrega. Se veía mucha más intensidad de la que hay ahora, aunque un partido fuera imposible de remontar, no se les veía tirar la toalla (quizás porque sabían que en el vestuario les iba a esperar Alfonso Solans Sr. para echarles cuatro gritos).

Tres temporadas pueden parecer pocas, pero la cantidad de partidos que jugó Cáceres hizo que los que lo recordamos con la blanquilla lo consideremos uno de nosotros, por lo que no podemos mas que agradecerle todo lo que nos dio, y alegrarnos de que tras lo sucedido, hoy vuelva a su casa, La Romareda, y se le pueda devolver un poquito, arropándole en un homenaje que se había ido retrasando. Aunque el día elegido pueda hacer que mucha gente no pueda acudir, pero seguramente no dejarán de pensar en Fernando.